domingo, 11 de mayo de 2008

Sin Inspiración

Algo interesante se me ha ocurrido... escribir sin inspiración. Hace tiempo que no escribo nada, puesto a la falta de inspiración que ultimamente me ha atacado, sin embargo, alguien que piense como yo trata de aprovechar toda emosión para crear algo bello y en este caso, mi inspiración es la carencia de la misma (¿qué irónico no?).

Inspiración, una palabra muy curiosa entre los amantes del arte. Se trata de algo tan abstacto que solamente quien se encuentra bajo su encanto es capaz de concebir lo que es, aunque esto no implique que se entienda lo que sucede en ese momento. Platón creía en “El Mundo De Las Ideas”, lugar que contiene todo lo que existe en el mundo material como una idea perfecta, y desde allí sale todo lo que nuestros ojos son capaces de percibir o no en forma de copia; la inspiración desde el punto de vista Platónica es como una especie de conexión entre nosostros con este mundo tan fantástico.

Como amante de la música, esta conexión me sucede muy a menudo ¡Qué cosa tan rara! Es increíble la manera en que nuestros cerebros sirven de interface entre el “más allá” y lo que somos en verdad (alma, espiritu, energía, etc... no sé a quién creerle). A la hora de crear cualquier pieza, incluso hasta para memorizar una canción, de alguna manera hay una conexión con algo superior. La música nace como un zumbido en mi cabeza, y luego, con un esfuerzo casi sobrenatural, esto que escucho en mi mente trato de sacarlo al plano físico mediante los instrumentos musicales y como resultado tengo una canción similar a la original, hasta ahora nunca me sale tan buena como la escucho en mi mente. Por este motivo es que me gusta decir cuando toco: Esta es mi interpretación de ..., puesto a que lo que logro transmitir no es plenamente lo que escucho en mi corazón.

Ahora, hay días que la inspiración nunca llega, y esto es frustrante porque vivo estas creaciones, me facina interpretar piezas, pero es algo tan extraño, a veces no hay más remedio que guardar mi guitarra. La falta de inspiración trae consigo la falta de creatividad y esto si que es incómodo.

La inspiración no es más que una manifestación de amor hacia algo determinado, se nos llena el corazón y enfocamos nuestra atención en lo que nuestro subliminalmente estamos captando. Luego convertimos lo que sea que hayamos recibido en otra cosa, tratamos de manifestar lo que hemos descargado del universo. La inspiración se puede comparar como una gran antena en nuestra cabeza, de repente tenemos señal, luego el momento mágico se va. Para mantener este estado es muy importante mantenerse en paz con nuestro entorno (el vecino, la novia, los estudios, entre otros...), es más fácil que nos suceda este fenómeno cuando nuestro color brilla alrededor de nosotros, es decir cuando estamos felices, creo que es imposible que nos inspriremos si estamos enfadados al menos que piensen como yo y convierten el problema en una fuente de inspiración.

Cada día lo primero que debemos hacer es dar gracias por estar vivos, por tener la oportunidad de poder aprender algo nuevo y no pedir mucho al menos que sea por algo que no puedas lograr con tu propio esfuerzo

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